La OCU se pone seria y avisa: estos son los Bizums que te van a salir caros

Con la campaña de la Renta a la vuelta de la esquina, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) quiere transmitir un mensaje importante a los usuarios de Bizum, ya que son muchas la duda sobre cómo tributan los envíos de dinero a través de esta plataforma. En ocasiones, tanto la cantidad como la frecuencia de las transacciones pueden llamar la atención de Hacienda.

En los últimos años, Bizum se ha vuelto un método de transferencia de dinero ampliamente utilizado por la mayoría de la población. A los ojos de la Agencia Tributaria, es un sistema tan reconocido como una transferencia bancaria tradicional. Por lo tanto, la obligación de declarar estos movimientos dependerá de las cantidades involucradas.

La alerta de la OCU sobre Bizum

Bizum funciona como transferencias bancarias convencionales, y la necesidad de declarar o no dependerá de la naturaleza de los ingresos recibidos.

En el caso de los pequeños pagos cotidianos, por lo general no es necesario declararlos.  Es poco probable que Hacienda investigue este tipo de transacciones, ya que suelen ser de bajo valor y de naturaleza personal.

Sin embargo, los pagos grandes o repetidos pueden llamar la atención de las autoridades fiscales. En tales casos, es importante declararlos adecuadamente para evitar sanciones tributarias.

Por ejemplo, los autónomos que utilizan Bizum para cobrar a sus clientes, especialmente en el comercio online, deben incluir estos ingresos en su declaración de la renta como parte de su actividad económica profesional o empresarial.

Del mismo modo, los propietarios que reciben el pago de la renta mensual por Bizum deben declarar estos ingresos como parte de los rendimientos de capital inmobiliario.

Bizum asegura que una vez se superen los 10.000 euros, será el propio banco quien informe a Hacienda. Por tanto, es crucial no pasar por alto la declaración de la Renta, ya que la Agencia Tributaria tendrá conocimiento de las transacciones de todos modos.

En resumen, mientras que los pequeños pagos cotidianos generalmente no requieren declaración, los pagos grandes o reiterados deben ser declarados correctamente para cumplir con las obligaciones fiscales y evitar posibles penalizaciones por parte de Hacienda.

El incumplimiento puede resultar en multas que van desde los 600 € hasta el 50% de la cantidad enviada. En casos de delitos más graves donde se desconozca el origen del dinero, las sanciones pueden ascender hasta los 150.000 €, partiendo desde los 60.000 € en los delitos menos graves.

Agencia Tributaria

El nuevo Plan Estratégico de la Agencia Tributaria para el período 2024-2027 marca un hito al incorporar a Bizum como una forma válida de pago para cumplir con las obligaciones fiscales. Esta decisión se fundamenta en la demanda de la sociedad por opciones modernas y prácticas de pago, reflejando una adaptación a los tiempos actuales. Además de Bizum, Hacienda también permitirá la domiciliación de pagos en entidades no colaboradoras de la Zona Única de Pagos en Euros (SEPA), ampliando así las opciones disponibles para los contribuyentes.

Esta medida busca simplificar los trámites para los ciudadanos y mejorar la gestión tributaria, ofreciendo mayor flexibilidad en los métodos de pago. La inclusión de Bizum como una alternativa válida refleja el compromiso de la administración con la modernización y digitalización de los servicios públicos. Además, la confianza en Bizum se basa en su eficacia, gratuidad y seguridad, aspectos que la convierten en una opción sólida tanto para la administración como para los usuarios.

Alerta sobre el fraude del «sí»

La tecnología avanza a pasos agigantados, pero con ella también surgen nuevas formas de fraude que ponen en riesgo nuestra seguridad. Uno de estos engaños, conocido como el fraude del «sí», se ha vuelto cada vez más común en el ámbito de las llamadas telefónicas. La OCU advierte sobre este tipo de estafa, que puede comprometer nuestros datos personales y bancarios.

El fraude del «sí» se basa en obtener una respuesta afirmativa por parte de la víctima durante una llamada telefónica. Los estafadores aprovechan esta respuesta para suplantar nuestra identidad o hacernos creer que hemos dado nuestro consentimiento para algo que en realidad no hemos autorizado.

Existen dos variantes principales de este fraude. En la primera variante, al contestar la llamada con un «sí», no recibimos respuesta inmediata. Posteriormente, una grabación nos informa de un supuesto servicio contratado que requiere un pago. Al intentar cancelar este servicio ficticio, terminamos proporcionando información personal y bancaria a los estafadores.

La segunda variante implica la suplantación de identidad por parte del estafador, quien se hace pasar por una entidad conocida, como un banco. Mediante preguntas que requieren respuestas afirmativas, los estafadores obtienen el «sí» necesario para intentar contratar servicios a nuestro nombre.

Si sospechas que has sido víctima de este fraude, es crucial actuar rápidamente para minimizar los daños. Revisa tus movimientos bancarios y busca tu nombre en Internet para asegurarte de que no se haya utilizado de manera indebida. Además, es fundamental denunciar estos fraudes a las autoridades y conservar registros de llamadas y recibos como prueba.